El pasado 4 de abril, la Iniciativa Interreligiosa para los Bosques Tropicales en Colombia participó en el foro “El aporte de los actores de fe en las negociaciones de paz”, un espacio de diálogo en el que líderes de diferentes iglesias y comunidades de fe reflexionaron sobre su responsabilidad compartida para promover acciones, desde las diversas espiritualidades, que contribuyan a la construcción de un país reconciliado y en paz.
Durante el panel “La contribución de los actores de fe en los mecanismos del cese al fuego y los alivios humanitarios”, Blanca Lucía Echeverry, coordinadora de IRI-Colombia, enfatizó que los conflictos armados no solo toman grandes costos en pérdidas de vidas humanas, sino que también producen una fuerte destrucción de hábitats naturales, promueven la extracción desenfrenada de recursos naturales y socavan los fundamentos sociales y éticos de la sociedad. El informe de la Comisión de la Verdad, establecida en el marco de los Acuerdos de Paz entre el Estado colombiano y la disuelta guerrilla de las Farc, examinó minuciosamente los efectos del conflicto armado en el medio ambiente. Este documento reveló cómo todos los actores involucrados en el conflicto utilizaron y abusaron de la naturaleza sin considerar la fragilidad de los ecosistemas, incluso en medio de confrontaciones crueles y destructivas.
El encuentro, convocado por Religiones por la Paz, el Consejo Interreligioso de Colombia y United States Institute of Peace, se llevó a cabo en el Auditorio de la Sociedad Colombiana de Arquitectos, en Bogotá, y contó con la participación de líderes religiosos, representantes de importantes instituciones eclesiásticas, como el padre Rafael Castillo, director de Pastoral Social; monseñor Héctor Fabio Henao, acompañante a las negociaciones con el ELN por la Conferencia Episcopal de Colombia; el doctor Humberto Shikiya, acompañante a los procesos de paz por el Consejo Mundial de Iglesias; y los miembros del consejo asesor de IRI-Colombia, el pastor Édgar Castaño, de la Confederación Evangélica de Colombia (CEDECOL), y monseñor Francisco Duque, obispo de la iglesia Anglicana de Colombia y presidente del Consejo Interreligioso de Colombia.
“El compromiso que tenemos en la Iniciativa Interreligiosa para los Bosques Tropicales es contribuir a restaurar las profundas heridas que hemos causado a la naturaleza, pero también ayudar a construir una sociedad más justa e incluyente, porque al proteger los bosques y controlar la deforestación contribuimos a proteger la vida digna de quienes se encuentran más expuestos a los desastres naturales derivados de la destrucción de la naturaleza y su biodiversidad. La deforestación es uno de los mayores obstáculos para la realización de la justicia ambiental por su relación causal con el cambio climático y por los efectos negativos que causa sobre la biodiversidad, la calidad del aire del aire y del agua, y la seguridad alimentaria y los medios de vida de las comunidades que obtienen sustento de los bosques”, concluyó Blanca Lucía Echeverry, coordinadora de IRI-Colombia.
