Teología de la creación, las tendencias de la deforestación en el municipio de La Macarena y servicios ecosistémicos y pagos por servicios ambientales, fueron los temas centrales del proceso de formación realizado por IRI Colombia el pasado 7 de noviembre, en el auditorio del Hotel La Fuente de La Macarena.
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60 líderes, miembros de los capítulos locales de IRI Colombia en La Macarena, La Cristalina y Alto Morrocoy acudieron a esta nueva jornada pedagógica, en la que participaron también representantes del gobierno municipal, la Policía Nacional y Parques Nacionales Naturales de Colombia.
“Desde la Alcaldía hacemos un llamado a la unidad. Los campesinos, la fuerza pública, la comunidad religiosa, las autoridades, debemos trabajar unidos. Es la única forma de enfrentar los desafíos ambientales”, subrayó la secretaria de Gobierno y alcaldesa encargada, Eunice Ramírez Yacuma, quien dio inicio al evento.
“En 2017, Naciones Unidas convocó a todas las iglesias y confesiones de fe, un sector social supremamente importante por la autoridad moral y espiritual y su gran influencia, con el propósito de que se unieran al esfuerzo mundial por la protección del medio ambiente y, en especial, de los bosques tropicales”, dijo la coordinadora de IRI-Colombia, Blanca Lucía Echeverry, refiriéndose al origen de la Iniciativa.
Además de conocer más sobre la misión y estrategias de trabajo de la organización, los asistentes recibieron una charla sobre teología de la creación, dictada por el pastor Martín Emilio Ramírez, coordinador de los tres capítulos locales en La Macarena.
“Llevamos 200 años utilizando los recursos del planeta y es momento de que le devolvamos algo. Se trata de un mandato de Dios, que nos exige dejar descansar la Tierra. Hagamos nuestra tarea de corazón, de esto se trata la Iniciativa”, señaló el pastor de la iglesia Asambleas de Dios.
Los sacerdotes y pastores, representantes de las iglesias y confesiones de fe de La Macarena; así como los representantes de los pueblos indígenas y de las comunidades campesinas y afrodescendientes de la región, también tuvieron la oportunidad de aprender sobre los avances e impactos de la deforestación en el municipio y, en particular, en los Parques Nacionales Naturales Sierra de La Macarena y Tinigua.
“El parque Sierra de la Macarena está conformado por diferentes ecosistemas, desde selva húmeda hasta bosques inundables. Su conservación es de gran importancia, en especial por la conectividad desde los Andes hasta la Amazonia y la Orinoquia”, explicó Susana Muñoz, coordinadora de la oficina del Parque Sierra de la Macarena, quien se refirió además a los 295 acuerdos de conservación implementados por la autoridad ambiental, que abarcan 10.249 hectáreas de bosque en recuperación.
Por su parte, Daniel Herrera habló sobre la crítica situación del Parque Nacional Natural Tinigua, que en los últimos cuatro años ha perdido 40.000 hectáreas de bosque, es decir, “el 25% del bosque que quedaba en pie”.
El profesional de ordenamiento territorial de esta área protegida se refirió también a la estrategia de reforestación a partir de la creación de seis viveros, gracias a los cuales esperan avanzar en la restauración ecológica de la zona y garantizar la conectividad de los ecosistemas.
Para finalizar, los integrantes de los tres capítulos locales de IRI en La Macarena recibieron una conferencia dictada por el biólogo Jhoha Cárdenas, en la que se abordaron los servicios ecosistémicos y los objetivos, requisitos y metodologías para presentar proyectos para el programa Conservar Paga, impulsado por el gobierno nacional en los denominados Núcleos de Desarrollo Forestal, y para pagos por servicios ambientales.
“Este es un programa internacional, avalado por el Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sostenible, que se ha implementado en países como Uganda, Costa Rica o Perú”, señaló el funcionario de Corpoamazonia.